El concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Valencia, Juan Giner, se ha reunido con la gerente de AUMSA, Ana Gil, y con el equipo técnico de la sociedad para ultimar los detalles que permitirán la reanudación de las obras de un edificio de 75 viviendas de protección pública en régimen de alquiler situado en la avenida de los Naranjos.
“Una de las prioridades de este gobierno es la construcción de viviendas de protección pública, ha asegurado Juan Giner”, tras explicar: “nos hemos encontrado con un proyecto que ha necesitado de un trabajo extra para solucionar problemas, cumplir plazos y sobre todo dar respuesta a las exigencias de los ciudadanos”.
Paralización de las obras en octubre
Las obras se paralizaron el pasado mes de octubre, ya que durante la ejecución de los muros de pantalla se produjeron asentamientos del terreno. Con el fin de identificar los problemas, a mediados de octubre se aprobó la realización en la parcela de una tomografía eléctrica 3D del terreno con el fin de identificar la existencia de patologías en el subsuelo.
Una vez realizado el estudio, se ha propuesto cambiar el sistema constructivo previsto de pantallas continuas, por un “sistema de pantalla de pilotes secantes, que asegura la estabilización de la excavación y extracción de las tierras generadas durante el proceso de perforación”, de forma que la próxima semana ya se podrán reanudar las obras.
Tras la paralización de las obras por problemas técnicos, “y gracias a la implicación de los técnicos de AUMSA y la empresa, se ha planteado una solución técnica que permitirá reiniciar las obras de este edificio de 7 plantas y cumplir con las previsiones para que en 20 meses tengamos finalizadas las obras”, ha indicado Giner.
75 viviendas y 34 plazas de aparcamiento
El edificio se construirá en un solar propiedad de AUMSA que cuenta con una superficie de 1.428,39 m² y con una edificabilidad residencial de 8.299,14 m², que permitirá construir un edificio de 75 viviendas, distribuida en planta baja y 6 plantas de altas, 34 plazas de aparcamiento, 12 para motocicletas y 32 trasteros en planta de sótano. En la planta de cubierta se ubican diversas salas comunes, así como una amplia zona de huertos urbanos.
Por último, cabe destacar que las características constructivas de las viviendas se alinean con los objetivos de los llamados ECCN (Edificios de Consumo Casi Nulo). Buscando la reducción de la huella medioambiental se aplican en este edificio las medidas de sostenibilidad necesarias, para alcanzar estos objetivos, con la obtención de un certificado BREEAM, método internacional desarrollado por la organización BRE Global del Reino Unido, que constate el grado de sostenibilidad de un edificio y además mejore la funcionalidad, flexibilidad y durabilidad de los edificios.
