La Conselleria de Sanidad ha presentado un plan de reorganización de la Atención Primaria que entrará en vigor en el primer trimestre de 2025. El conseller Marciano Gómez ha explicado que la nueva estructura laboral plantea que la jornada ordinaria se realice de lunes a viernes, reservando los sábados exclusivamente para guardias de atención continuada, con la correspondiente retribución complementaria. De este modo, las horas trabajadas los sábados para completar la jornada anual se trasladarán a las tardes, ajustando así el horario a las necesidades reales de los centros de salud.
Este cambio, que será presentado en la Mesa Sectorial, tiene como objetivo aumentar el número de citas disponibles por las tardes, dado que los sábados se ha detectado que la demanda corresponde principalmente a urgencias. Gómez ha asegurado que las negociaciones con los sindicatos avanzan positivamente, por lo que se prevé aprobar el decreto en las próximas semanas.
El conseller también ha destacado que esta modificación no implicará una reducción de la jornada laboral, que seguirá los términos del Acuerdo de la Mesa General de Negociación, con la reducción prevista a 35 horas semanales. Asimismo, ha subrayado que la reorganización facilitará la conciliación de la vida laboral y familiar del personal sanitario.
Nuevas agendas y optimización de citas
Otro de los aspectos relevantes del plan es la implementación de un modelo innovador de agenda única para cada profesional de atención primaria, con el fin de homogeneizar y sistematizar los procesos. Este modelo se probará en seis zonas básicas de salud antes de su extensión a toda la Comunitat Valenciana. La reestructuración busca mejorar la gestión compartida de la demanda y optimizar la asignación de citas mediante asistentes virtuales apoyados en inteligencia artificial.
Gómez ha resaltado que la actual configuración de las agendas no refleja de manera adecuada la capacidad asistencial del personal ni los tiempos de demora real para ser atendido, que oscilan entre seis y siete días. Esta medida, además, pretende reducir el porcentaje de llamadas no atendidas, que en algunos centros de salud alcanza el 52%.
Nuevo modelo de Atención Primaria y Comunitaria
La reorganización también incluye un nuevo modelo de Atención Primaria y Comunitaria, que redistribuirá las tareas asistenciales en función de las categorías profesionales. Esto busca desburocratizar el sistema y mejorar la calidad de la atención. Se prevé la creación de jefaturas de servicio y sección en Atención Primaria, equiparándola a la estructura de Atención Hospitalaria, con el objetivo de prestigiar la especialidad de Medicina Familiar y Comunitaria y hacerla más atractiva para los profesionales.
Además, se introducirá una nueva categoría de personal auxiliar sanitario en Atención Primaria y Comunitaria, y se establecerán procedimientos de gestión compartida de la demanda. Las nuevas jefaturas supervisarán los circuitos de citación y monitorizarán el acceso a los servicios, garantizando una atención más rápida, eficiente y equitativa para los pacientes.
Este nuevo modelo no solo mejorará la capacidad resolutiva de los centros de salud, sino que también permitirá un uso más eficiente de los recursos, evitando sobrecargas administrativas y potenciando la atención de los procesos agudos mediante guías de intervención de enfermería.