El concejal de Urbanismo, Vivienda y Licencias, y alcalde en funciones, Juan Giner, ha anunciado que la segunda fase del plan de asfaltado y renovación completa de calzadas y aceras, “que ha puesto en marcha el gobierno de María José Catalá, arrancarán este lunes en el barrio de Arrancapins y que se adelanta la renovación de las aceras con baldosas de granito natural del puente de Aragó”.
En concreto, los operarios trabajarán en la calle de Albacete, del Marqués de Cenete y de Salas Quiroga, “donde se han detectado abundantes desperfectos”. Por ello, ha subrayado el concejal, “vamos a seguir trabajando para que las calles de nuestros barrios presenten una mejor imagen y sean seguras para todos”.
Calles que serán asfaltadas en Arrancapins
Según ha explicado Giner, en los primeros meses del nuevo equipo de gobierno los técnicos han detectado “deficiencias en los viales que suponen un peligro tanto para peatones, como para ciclistas y conductores”. En este sentido, el Ayuntamiento de Valencia aprobó, a inicios del mes de agosto, “una inversión de cerca de un millón de euros para arreglar los pavimentos con multitud de irregularidades, hundimientos, roderas y baches”, ha afirmado el titular de Urbanismo.
Según el Servicio de Coordinación de Obras en la Vía Pública y de Mantenimiento de Infraestructuras, en la calle de Albacete existen múltiples baches y agujeros, llegando el pavimento al final de su vida útil, por lo que se procederá a renovar las rigolas en los puntos detectados, a fresar 5 centímetros en toda la superficie y ejecutar una capa de aglomerado nuevo con áridos calizos. Se repavimentará también el cruce con la calle de Marvà y un tramo de esta hasta la calle de Jesús, ya que presenta múltiples peladuras.
En cuanto a la calle del Marqués de Cenete, se han detectado peladuras, hundimientos, baches y zanjas. Además, no existe rigola en el límite de la calzada con bordillo, por lo que presenta múltiples zonas en las que se acumulan las aguas de lluvias generando charcos en el aparcamiento. Por ello, se va a realizar nuevos encintados con rigolas que aseguren una eficaz evacuación de las aguas y una rasante para la circulación adecuada, fresar 5 centímetros toda la superficie y ejecutar una capa de aglomerado nuevo con áridos calizos que asegure un buen comportamiento frente a los giros de los vehículos al estacionar.
Mejoras para los peatones y ciclistas
Y, por último, la calle de Salas Quiroga presenta múltiples agujeros en los aparcamientos y defectos en las rigolas existentes con encintados de adoquín. Además, está señalizada como ciclocalle, por lo que se deben extremar las precauciones en la rodadura, puesto que está siendo utilizada por ciclistas y vehículos de movilidad personal, que necesitan unas condiciones de rodadura más seguras.
Por ello, se van a realizar nuevos encintados con rigolas que aseguren una eficaz evacuación de escorrentías que no generen como ahora desniveles peligrosos para los usuarios que bajan de los vehículos, y dotar de una rasante para la circulación cómoda, fresar 5 centímetros toda la superficie y ejecutar una capa de aglomerado nuevo, cerrada, con áridos calizos, que asegure un buen comportamiento y una rodadura cómoda a los ciclistas y usuarios de patinetes.