Más de 270 cámaras controlan la circulación en la Zona de Bajas Emisiones de Valencia

Las más de 270 cámaras preparadas para la gestión y control de la Zona de Bajas Emisiones de Valencia, ZBE, han entrado este lunes en funcionamiento, una vez de que la Junta de Gobierno Local aprobó el pasado viernes el arranque del sistema formado por los equipos y aplicaciones informáticas previstas en el contrato de suministro del sistema de gestión para la implantación de la ZBE en la ciudad. Tal como se establece en el acuerdo de la Junta, la puesta en marcha del sistema no implicará la imposición de multas en ningún caso.

El servicio de Movilidad ha coordinado la ejecución de dicho contrato, en el marco de la Estrategia del Plan de Recuperación, Transformación y resiliencia – financiado por la Unión Europea – Next Generation EU, para su puesta en funcionamiento el lunes 1 de diciembre, según el calendario de implantación previsto en la Ordenanza, aprobada provisionalmente el pasado mes de febrero.

El sistema comprende los siguientes componentes esenciales que ya han sido ejecutados: En primer lugar, el suministro e instalación de todos los equipos ubicados en las calles que permitan controlar los vehículos que circulan por la ZBE y conocer de forma fiable los niveles de contaminación atmosférica y gases de efecto invernadero (GEI) existentes. Ello incluye los puntos de control de paso de vehículos, equipados con cámaras de lectura automática de matrículas, los sensores de medición medioambiental, y los paneles de información variable, entre otros elementos.

En segundo lugar, el sistema incluye la extensión de las redes eléctricas y de telecomunicaciones para la alimentación de los equipos y su interconexión a la red municipal de telecomunicaciones. También forma parte del dispositivo el suministro tanto de los equipos y sistemas informáticos, hardware, a instalar en el Centro de Gestión del Tráfico de Ayuntamiento (y en otras ubicaciones), para alojar y procesar las aplicaciones informáticas, como el de desarrollo de las aplicaciones informáticas necesarias, software, para gestionar, operar y controlar los equipos, e intercomunicarse con los diferentes componentes del sistema y con sistemas externos.

Finalmente, se contempla también el desarrollo de un sistema avanzado para la monitorización y control de la calidad aire asociado a la gestión de la ZBE, que permita conocer la correlación entre los patrones de movilidad y la calidad del aire. Y todas las actuaciones complementarias que permitan operar y gestionar la ZBE en condiciones de seguridad y funcionalidad.

El objetivo de la puesta en marcha de los equipos de gestión es, tal como se subraya en el acuerdo de la Junta de Gobierno, “monitorizar los pasos de los vehículos que circulan por cada punto de control, e identificar sus etiquetas y tipología y su lugar de registro o procedencia, todo con el objeto de elaborar estudios estadísticos que permitan identificar patrones de movilidad y estudiar la evolución del parque móvil, así como los efectos que tendrán la aplicación de políticas de fomento de la movilidad sostenible (como el incremento de oferta de transporte público, la puesta en marcha de nuevos carriles bici o la promoción de la accesibilidad peatonal).